Cuál es el objetivo de la empresa?
«Maximizar el valor de la empresa, el beneficio del accionista….» son respuestas que seguramente nos darían por buenas en muchos sitios (en casi todos, lamentablemente, hasta hace muy poco) a la pregunta sobre el objetivo fundamental de la empresa.
Pues bien, además de alejarse de una visión social de la economía/empresa, parece que la idea de maximizar el valor del accionista como objetivo de la empresa (indirectamente, a partir de convertirse en objetivo de sus gestores), propuesta por Jensen y Meckling, es contraproducente, según vemos en este artículo de The Guardian. Un buen punto de partida para comentar varias cosas:
Maximizar el valor (bienestar) de la sociedad es algo que sólo se puede hacer cuando todos aportamos, porque realmente trabajamos en nuestro propio beneficio, como individuos y como sociedad (no en el del accionista). Llamemosle «valor compartido«, «economía del bien común«, simplemente abandonar el Taylorismo o como queramos, pero para ir a este nuevo modelo no debemos confiar en que los actuales dirigentes cambien su comportamiento, tampoco el camino es cambiar a esta cúpula y sustituirla por otra con el nuevo discurso. La única opción es dejar de delegar en un tercero este cambio de modelo y hacerlo en primera persona.
Pero sí que es cierto que este cambio será más sencillo si, además de tomar conciencia en primera persona de ser un agente del cambio, las organizaciones facilitan el camino.
Y aquí es donde quiero comentar otras paradojas de liderazgo y gestión que he visto en este artículo de McKinsey. En un resumen rápido, el artículo comenta la paradoja (1) de que para una adecuada gestión del cambio se necesita estabilidad; la paradoja (2) de que para controlar que el trabajo va en la dirección de los objetivos se necesita potenciar el desarrollo personal de los trabajadores; y, finalmente, la paradoja (3) de que para producir un valor consistente tenemos que, irremediablemente saber tratar y convivir con la variabilidad (muy en la linea de lo que predica el pensamiento Lean)
Parece claro enlazar ambos artículos: Las organizaciones, como otras estructuras sociales, dependen en gran medida del comportamiento de sus individuos, por lo que si queremos llegar al cambio de modelo visto al inicio de este post, deberemos liderar y gestionar este cambio. Cada uno en distinta medida, pero todos.
Otro paso más para la empresa y la sociedad en red.